Mujer cierra las cortinas

Una muchacha de 20 años sale de trabajar de la feria de Málaga. Cinco jóvenes la rodean, dos son menores de edad. Le roban el bolso. La apartan y varios de ellos la violan. A la muchacha se la encuentra la policía local tirada en el suelo, llorando. Cuenta a los policías que fue violada. Una rápida intervención policial logró detener a los autores en apenas una hora. Pero la fiscalía y la juez observa contradicciones entre los testimonios de la muchacha y los de los agresores, que dicen que hubo relación sexual “consentida”. Y dejan en libertad a los 3 mayores de edad, los dos menores quedan en un centro de retención.
En la puerta de los juzgados los imputados por la violación son recibidos por aplausos, delante de la prensa. El alcalde de Málaga quita importancia a los hechos y dice que en España hay 1000 violaciones al año. Todo esto ocurre cuando el ministerio del Interior acaba de publicar en su web unos consejos dirigidos a las mujeres, para prevenir las violaciones sexuales. Les recomiendan que cierren las cortinas de casa para evitar miradas indiscretas, que no hagan auto-stop, que si viven solas enciendan varias luces y no pongan su nombre completo en el buzón. Una visión de la violación sexual que induce a cargar la responsabilidad en la mujer, que parece que no tiene cabeza y le gusta ir por sitios oscuros provocando.
Me sumo al consejo de las cortinas. Mujer, cierra las cortinas. Por ahí afuera te están acechando. Enciende varias luces de casa, que no se entere que estás sola. Hay un ministro de Justicia que quiere violar tus ovarios, decidir la maternidad por ti. Un ministro dispuesto a retroceder décadas en el código penal para obedecer a una iglesia en la que sólo mandan los hombres. Un ministro que redacta las leyes que recortan las libertades de las mujeres con la misma mano que firma los indultos de los corruptos.
Mujer, cierra las cortinas. Por ahí afuera hay un ministro del Interior que se permite darte consejos para que no provoques a los violadores yendo por los sitios oscuros. Un ministro que llegó a comparar la libertad de la interrupción del embarazo con el terrorismo. Sí, el mismo ministro que pone una medalla a la escultura que representa una virgen, pero no lo hace en una noche de borrachera y profanación, sino usando el Boletín Oficial de un estado laico.
Mujer, cierra las cortinas. Por ahí afuera hay una ministra de Sanidad que se ha especializado en recortar los presupuestos e imponer el copago. Una ministra que no sabía quién compraba los confetis en la fiesta de cumpleaños de sus hijos o con qué dinero compró su exmarido el jaguar que aparcaba en el garaje de casa. Sin embargo esa ministra tan poco curiosa en su casa se vuelve novelera y quiere saber hasta el último dato económico de tu familia, porque si se entera que alguien cobra algo en los alrededores te impone el copago sanitario, te quita las ayudas a la Dependencia, te cobra los medicamentos para tus familiares enfermos crónicos.
Mujer, cierra las cortinas. Que no te vean estos gobernantes que en la oposición salían a la calle de la mano de los obispos en las manifestaciones contra el derecho de los homosexuales a amarse y a convivir como el resto de los ciudadanos, manifestaciones con pancartas para “defender a la familia”. Eso en la oposición. Ahora que gobiernan sabemos que en realidad hablaban de defender a “sus familias”, así en la Gürtell como en Suiza, “resiste, Luis, resiste”.
Mujer, cierra las cortinas. Te lo pide el ministro del Interior. Un ministro tan gandul que copió las recomendaciones antiviolación de otro país. Cierra las cortinas pero no para que no te vean, sino para que no veas como gobiernan contra ti, contra la mayoría de la gente y contra su programa electoral estos ministros que no son capaces de entender que los violadores y abusadores sexuales son producto de una sociedad machista y patriarcal, de una visión de la mujer como florero. Por eso, mujer, cierra las cortinas, para que no te localice un gobierno de violadores, que violan nuestros derechos todos los viernes.
@juanglujan

PD: Aclaro que este texto fue escrito cuando lo que había publicado la juez fue una orden de alejamiento contra los jóvenes denunciados y los había imputado por violación y robo. Después de la publicación de este artículo la juez archivó la denuncia. Un archivo que puede ser recurrible por la denunciante. En mi opinión si la justicia lenta no es justicia, esta justicia exprés, en la que ni siquiera se requirió a forenses y sicólogos para estudiar a la denunciante y los denunciados, no es una forma de actuar muy rigurosa. En este sentido los periódicos publicaron algunos artículos de opinión criticando el archivo de la denuncia por violación. La imagen que encabeza este texto fue difundida hoy en las redes sociales, corresponde a una campaña escocesa contra las violaciones pero que señalan al violador. La campaña se llamaba «this is not an invitation to rape me» (esto no es una invitación para que me violes.

PD2: La joven que denunció la violación en la feria de Málaga reconoce a la jueza que se la inventó. La joven temía que difundieran el vídeo que le grabaron mientras mantenía las relaciones sexuales. Esta chica no hizo un daño a la imagen de los muchachos con los que mantuvo relaciones sexuales que ahora dice que fueron consentidos, sino un daño tremendo a cientos de mujeres que son violadas y les de vergüenza denunciar porque muchas veces es difícil de demostrar. Una denuncia falsa hace mucho daño a las denuncias verdaderas.