Santiago Carrillo: «La socialdemocracia está jugando hoy el papel de un partido liberal»

El miércoles 16 de marzo de 2011 entrevisté a Santiago Carrillo. Fue en el programa El Correíllo en Canarias Ahora Radio. Duró media hora, y en ella Santiago Carrillo se mostró muy lúcido. Hablamos de la confusión ideológica, de la crisis de la izquierda, de la criminalización de los sindicatos, del papel de los comunistas canarios en la lucha contra la dictadura franquista. Carrillo negó que José Carlos Mauricio fuera su delfín político «eso fue un invento de personas desocupadas» nos dijo, y apostó por una izquierda que sea verde y roja.

-Juan García Luján. Las Palmas de Gran Canaria

-Acababa de publicar el libro “La difícil reconciliación de los españoles”, semanas después del 30 aniversario del golpe de Estado.

Santiago Carrillo: Todavía hay gente que no comprende que el golpe del 36 retrasó el desarrollo de este país 40 años. Hay gente todavía con restos ideológicos del nacionalcatolicismo que ejerce influencia en sectores considerables del país. Todavía faltan cosas para llegar a una situación en la que las instituciones democráticas sean consideradas por todos”

-Cree que las nuevas generaciones de los jóvenes de hoy asumen el discurso de “España se rompe, los rojos”, etc?

S.C: Los jóvenes de hoy no tienen idea de lo que pasó en este país en 1936. No se ha dado en la escuela una versión objetiva de lo que fue aquello. No es que los jóvenes no asuman los cambios. Pero hay mucha confusión entre ellos. En la Europa de hoy, no sólo en España, tras la crisis hay una confusión entre derecha e izquierda, la gente se pregunta en qué se diferencia. Hay una crisis de la izquierda en este país. De todo esto tanto ennEspaña como en el resto de Europa terminará saliendo algo positivo, pero en este momento hay mucha confusión, muchas dudas. Sobre todos los jóvenes están más preocupados porque en lo inmediato no ven salida para orientar su vida. Se exponen a una precariedad seria en el trabajo

-En esta confusión ideológica ¿qué papel debe jugar la socialdemocracia ante la dictadura de los mercados ¿Parece que hay actitud de resignación.

S.C: La socialdemocracia está jugando el papel de un partido liberal. Ni siquiera es ya socialdemocracia. De esta crisis quizá pueda salir una nueva izquierda que lo sea de verdad. Una izquierda adaptada a los nuevos tiempos, a los nuevos pro lemas. La socialdemocracia está contribuyendo a la confusión entre los jóvenes.

–¿Qué papel hizo el Partido Comunista Canario , la izquierda canaria en la transición, en la lucha por las libertades?

S.C: Hubo un tiempo en que el Partido Comunista de canarias fue muy activo contra la dictadura. Hubo una serie de personas que jugaron un papel importante. Esas personas prácticamente han desaparecido, se han esfumado. Ese papel debería ser reconocido. No sé si hoy es reconocido. Los comunistas hemos estado entre los padres fundadores del estado democrático y en este momento, en parte por nuestros errores, se nos reconoce muy difícilmente.

–Mauricio que fue el secretario general de los comunistas canarios y acabó siendo portavoz de la derecha nacionalista ¿fue alguna vez su delfín como se llegó a decir en las islas?

S.C: No, eso fueron comentarios de algunos desocupados. Mauricio no fue nunca delfín. Delfines yo no he tenido. En sus tiempos era un hombre inteligente, que tenía claridad de ideas. Luego ha cambiado totalmente y Mauricio yo lo veo como un hombre de la derecha canaria que ha hecho su tiempo

–¿Qué papel deben tener los sindicatos en estos momentos?

S.C:Los sindicatos en la práctica son las únicas organizaciones de la izquierda con una presencia y una fuerza real organizada en el país. Los sindicatos pueden tener hoy defectos a corregir, a superar. Pero hay una campaña de la derecha derecha contra los sindicatos que está lligada a todo el intento de eso que llaman los mercados, el stama financiero, de hacer caer sobre los trabajadores todo el peso de la crisis, con medidas de ajuste, con austeridad entre comillas, con pérdidas en las pensiones. En la práctica con la anulación de lo que hay en España de Estado de Bienestar. Para hacer eso la derecha necesita destruir o por lo menos dejar sin capacidad a los sindicatos. Razón para que todos los que van a cargar el precio de la crisis defiendan a los sindicatos.

-¿Hay peligro de que la ultraderecha crezca en España como está ocurriendo en Europa?

-S.C:De momento no hay peligro porque la ultraderecha en España es el partido popular. El pP inspirado ideológicamente por Aznar plantea todas las reivindicaciones de la ultraderecha: destrucción del estado de bienestar, destrucción del estado de las autonomías, de las tendencia federalista. La extrema derecha no necesita hacer un partido como Le Pen en Francia, porque el PP defiende las posiciones de ultraderecha.

_Ud que sigue la actualidad Sortu debería en su opinión legalizarse para avanzar en la paz

S.C: Yo pienso que debería legalizarse sin ningún género de dudas. Desde el punto de vista jurídico no se puede encontrar a ningún argumento para negarle la legalidad, porque se ajusta a la ley de partidos. Si le cerramos a la izquierda abertzale la posibilidad de presentarse en democracia, estamos dándoles argumentos a ETA. Me parece una torpeza infinita oponerse a su legalización. Si se legaliza y se permite la actividad de la izquierda abertzale, ETA va a terminar las últimas y débiles posiciones que tiene. Lamento que el gobierno socialista se haya dejado arrinconar por el PP. En la práctica se reclama no la desaparición de ETA, sino la desaparición de la izquierda abertzale, que es una parte importante del pueblo vasco.

-¿Como ve la Izquierda Unida actual que lidera Cayo Lara?

S.C:Evidentemente yo tengo más simpatía hacia ese grupo que hacia otros. Pero yo creo que IU ya no sirve, ya no es el partido que puede representar a la izquierda española, porque ha ido reduciéndose. Ahora sus discusiones más parecen peleas por repartirse el pequeño trozo de la tarta política que aún les queda, que discusiones de tipo ideológico sobre lo que debería ser la izquierda. Hace falta una nueva izquierda que ya no va a ser ni el PCE ni la socialdemocracia. Va a ser un continuación de lo que fue la izquierda española histórica pero adecuada a los nuevos tiempos, que luche de verdad por el cambio. Pero interesando en esa lucha a sectores más amplios de los que participan hoy. La crisis de la izquierda no se resuelve ya ni en el PCE ni en la socialdemocracia.

-¿Se verá una tercera república en España?
S.: Seguro que se verá una tercera república. Pero ese no es el problema esencial. Los que somos republicanos, además de tener ideas socialistas o comunistas, no debemos irrealizar la república. Si a mi me dijeran que van a cambiar la monarquía parlamentaria por una república presidencialistas, prefieriría la monarquía parlamentaria, porque la república presidencialistas en manos del PP sería mucho peor que la monarquía que tenemos hoy.
En Italia hay república y está Berlusconi, en Italia es república y está Sarkozy. En EE UU hay una república presidencialistas en la que puede haber guantánamos, prisiones secretas donde se torturan, guerras sin sentido como la de Irak o Afganistán. Para una vez que en los pueblos árabes surgen movimientos populares resulta que esas repúblicas dejan que se les machaquen y aplasten a esos pueblos.
Hoy los españoles tenemos problemas mucho más agudos y serios. Yo no plantearía el tema de la república como un tema inmediato, porque no lo es. Antes de eso deberíamos organizar una izquierda de verdad.

-¿La identidad de la nueva izquierda debería centrarse en la ecología y el Estado del Bienestar o también debería aspirar a cambiar este sistema económico?
S.C: Una nueva izquierda debería aspirar a transformar la sociedad, desarrollar la democracia de lo político a la propiedad, debería luchar por transformar el sistema capitalista a través de vías democráticas. Esta nueva izquierda debe defender la salud del planeta, la ecología, la paz. Pero fundamentalmente yo no veo a la nueva izquierda simplemente como un partido de los verdes. Esa nueva izquierda debe ser roja también.

-¿En qué generación se verá la reconciliación de los españoles?
S.C:No lo sé pero hay que trabajar para eso. Para conseguirlo hace falta esa izquierda que hoy echamos de menos en este país. Hay que superar la crisis de la izquierda. Porque la derecha va a comprender mejor algún día la necesidad de ciertos cambios si la izquierda es fuerte, si hay una mayoría de españoles que apoyan a esa izquierda.

-¿Algún día tendremos una mejor imagen de Juan Negrín?
S.C: Poco a poco , y la fundación en la que trabaja Antonio Aguado trabaja en ello, poco a poco la figura de Negrín tan maltratada por su propio partido y por la derecha. Poco a poco se reconocerá la figura de Negrín como la de un gran patriota que en un momento muy difícil entregó toda su energía y saber a la causa del progreso de España. Fue muy maltratado porque triunfaron los fascistas y porque sus propios compañeros renunciaron a reivindicarle. Hoy algo ha mejorado eso. Deseo a mi amigo Antonio Aguado que la fundación Juan Negrín cumpla ese fin.

–Permítame una pregunta personal. Con 96 años ¿sigue usted fumando?
S.C:Sí. Un paquete al día

-Parece que usted lo lleva bien:
S.C: Mire usted yo no voy a dejar de fumar ahora. En general los que dejan de fumar lo hacen pensando en su salud, en prolongar su vida y la de los que le rodean. Yo a mi edad no tengo ninguna intención de hacer nada para prolongar mi vida. Se ha prolongado mucho, si se prolonga un poco más bien. Pero a los 96 años uno no puede pedir más