Cuando se abre La Ventana

Dicen que cuando se cierra una puerta se abren otras. Quizá es la frase que más escuché en los últimos meses, tras el naufragio de aquel barco cargado de utopías que me dejó en la orilla del desempleo, esa de la que tanto hablan los que conciben la política como una agencia de colocación de amigos y afiliados.

Estuvo bien visitar la orilla del paro, ser un número más en esa lista de sospechosos a los que hay que estimular recortándoles más las prestaciones (Rajoy dixit en este martes que pareció 13). Estuvo bien la experiencia de saberse que no soy “de los nuestros” para ningunos de los gobernantes, y que por tanto no acudió ningún comisario político a rescatarme como testigo protegido o persona a la que pagarle favores pendientes. No, ahí estuve tan paciente, tan preocupado como uno más, casi desnudo como los hijos de la mar (que diría Antonio Machado).

Pues meses después de cerrarse aquella puerta me abren una ventana. Y esta ventana es más grande que otras puertitas que quedan por ahí. Es una ventana inmensa en la que te puedes asomar y ver todas las calles de Canarias. Y allí está la gente, para mirar y ser mirada, para escuchar y ser escuchada. Te hablo de La Ventana de Canarias, la que abren cada tarde de 6 a 7 en la red de emisoras de la cadena SER en todas las islas.

A partir del próximo lunes 16 de julio un servidor de ustedes se pondrá frente al micrófono para vivir la radio, el medio que más me gusta. Para intentar seguir creyendo que, como decía Gabriel García Márquez, el periodismo es el oficio más bello del mundo (espero que la frase no esté borrada de la débil memoria de Gabo).

Agradezco profundamente a Lourdes Santana, directora de la cadena SER en Canarias, la confianza depositada en un servidor. Ya compartimos juntos siete años de trabajo en Televisión Canaria. También agradezco la cariñosa acogida de todos los compañeros de la SER. En unos momentos complicados mantienen la profesionalidad y el compañerismo en lo más alto. Asumo con mucha ilusión el reto de abrir La Ventana cada tarde, para seguir el sendero que venían recorriendo esta temporada Elena Falcón en las islas (a la que sustituyo por su próxima maternidad) y Gemma Nierga desde Barcelona, una radio menos cargada de política y macroeconomía, una radio más social y cercana.

Pues eso, que estoy un montón de contento de poder asomarme cada tarde a La Ventana en la SER. Escribió José María Millares Sall: “De la ventana/ a la nube la distancia es sólo ese vuelo/ sólo ese salto de pájaro/ y sólo esa mano que se alarga y no llega/ y es tan poca y tanta la altura/ que hasta la torre/ con sus ojos necesita escaleras/ para llegar a la nube y nunca alcanzarla/ como a ser mañana/ como a no ser nunca si en el polvo/ del silencio/ todo acaba”.

Afortunadamente no se cumplió el verso de Millares y no acabó todo en el polvo del silencio. Se me cerró una puerta y se me abre una hermosa ventana. Por eso cada tarde, de seis a siete, en la red de emisoras de la cadena SER en toda Canarias se abre La Ventana. Te invito a que te asomes. Para escucharte, para escucharnos.